JUVENTUD, DIVINO TESORO
¡Ah!, juventud divino tesoro, siempre se dijo y siempre fue, pero últimamente la cosa no está tan clara y el hecho de acumular años es más un alivio que una carga. Si los comunistas, por boca o cloaca de su Delegado de Orden Público en Madrid, felizmente fallecido hace pocos días, decían que los jóvenes estaban para “pencar” y punto en boca, los falangistas siempre vieron en la juventud la única salida para la redención de la Patria, hasta el extremo de limitar la edad en la que se podían ostentar los principales cargos dentro del Movimiento llamado a hacer de España una Patria una y socialmente justa. Cierto es que la Unificación enterró esta premisa, y en la actualidad algún pintamonas pudiera referirse a los jóvenes llamados a liderar la causa como “niñatos”.
¿Y cómo está la cosa hoy? Pues para abrirse las venas. Un simple repaso a las juventudes de los partidos mayoritarios, llamados a escribir el futuro del país, hace que lo más imperioso hoy, aparte del caballo de Gil, sea sacar un billete de avión para Guinea Conakry y que le vayan dando a todo el mundo. Ejemplos:
Víctor Casal se llama el artista. Es a la sazón el caudillito de las Juventudes Socialistas de Cantabria, esa “secta” inoperante que ha servido de trampolín a algunos trepas, como Pedrito Casares el Enchufado, aunque éste no fuera capaz más que de dirigir las juventudes en Santander. Por lo demás no ha pasado de ser un club donde de lo que se trataba era de darle un “empujón” a la compañera de turno. Pues bien, se ha descolgado el fenómeno con una propuesta que, de no ser por la triste situación del país en todos los aspectos, no pasaría de bromita de 28 de diciembre. ¿Qué propuso el futuro servidor público? Pues que la Plaza de Toros de Santander fuese convertida los fines de semana en BOTELLÓDROMO para que cientos, miles de anormales embrutecidos puedan darle al morapio sin problema. Para quien no es de Santander, el coso de Cuatro Caminos está integrado en la ciudad de manera que se pueden imaginar a cientos o miles de insolventes mentales Cuatro Caminos abajo, portando sus bolsas del Lupa en peregrinación como los yonquis que van a la Cañada Real por su dosis. Casal no dijo nada de qué hacer con los vecinos que viven alrededor de la plaza y que tendrían que aguantar a varios cientos o miles de enajenados bramando, barritando o berreando en horario de descanso, quien limpiaría las vomitonas, meados y preservativos que les dejaría la horda en sus portales y calles; como tampoco dijo quién se encargaría de la factura de los destrozos originados cada fin de semana en el recinto, ni de la limpieza. Las Juventudes Socialistas proponen, pues, lugares donde los jóvenes puedan enajenarse sin peligro de ser multados y sus mayores, la Tezanos, el Guimeráns o el Mañanes no han dicho ni esta boca es mía, ni han mandado a este capullo a reciclaje. Claro que, si fuese necesario buscar un aprisco para los del botellón, nada mejor que la sede del PSOE, que podría ser cedida altruistamente por sus inquilinos para fumadero, lupanar y vinatería; total no se iba a notar la diferencia.
Vamos con las Nuevas Generaciones, nuevas porque lo dicen ellos porque huelen a viejo como sus mayores. No han tardado en salir al paso de la propuesta del cretino socialista para decir, apriétense los machos, que eso no puede ser porque iría contra la normativa de beber en la calle. No estaría de más que el Alcalde Inteligente, cuando tenga un rato y se baje de la burbuja inmobiliaria, les diese alguna clase a sus pijitos para que sean inteligentes como él, de manera que sepan distinguir entre la puta calle y un recinto a cielo descubierto; más que nada para no caer en el ridículo. Dejando esto de lado, el PP debiera plantearse eliminar de su organigrama esta banda de trepas antiestéticos. Si no hace mucho tiempo su líder fue pillado in fraganti en un control de alcoholemia sacando notable alto, ha sido otro de sus gerifaltes el que, él solito, se ha cargado la cabeza de la disidencia cubana, algo que ni Fidel pudo conseguir. Ahora, el Régimen le condena a cuatro años, pero no tengo claro si de cárcel o de spa rodeado de mulatas en agradecimiento. Con toda seguridad le será concedida la orden José Martí con hojas de roble, espadas y diamantes por su colaboración con la Cuba Libre.
El tercero en discordia es el tonto entre los tontos, el que ha sido capaz de desposeer de título y record a su colega de Gijón que recientemente se había hecho acreedor al título, (ver entrada anterior). Las juventudes del Partido Comunista, ya está bien de la payasada de Izquierda Unida, en Mérida se han cubierto de gloria, porque de mierda ya están cubiertas todo el año a lo largo y ancho de nuestra geografía, han escrito una página de gloria en el libro del humor hispano. Fíjense antes de continuar leyendo en el tipo que gasta el fulano, más próximo al hombre de Neandertal que la tipo humano contemporáneo. Pues el chavalote, el que no le consta ocupación alguna, con sus 24 añazos desperdiciados, no ha dudado en ponerse delante de alumnos de secundaria para asaltar un colegio de curas al grito de “Dónde están los curas que los vamos a quemar”, a sabiendas de la impunidad que la canalla roja de toda laya disfruta. Total arrancar crucifijos ni cuesta ni es arriesgado, pero luego, como dicen los camaradas cubanos tan agradecidos a Carromero, se “cagolotea” y en declaraciones de radio niega lo que se ve en las imágenes. ¿Y su partido? Pues nada, los comunistas en el monte, como siempre, que si les han criminalizado, que si la abuela fuma y alguna otra bobada más pero nada de condena del asalto, nada de la bajeza de atentar contra las ideas religiosas de la mayoría de españoles, nada del desprecio al derecho democrático a elegir lo que uno quiera, nada, como es normal en esta canalla consentida.
Por todo ello, cumplir los cincuenta, los sesenta, los setenta y si Dios tiene a mal hacernos vivir más, será una bendición que nos aleje de tanta mediocridad, de tanto vacío, de tanta bellaquería.
2 comentarios
Miguel -
Un saludo
san -