EFICIENCIA, MADE IN LOLA Y ANGEL (IV)

Vamos a terminar aquí el tortuoso camino por el País de las Maravillas de esta pareja de Alicias. Lo vamos a hacer viendo la eficiencia alcanzada por el modelo en cuestión. Comencemos por la Industria: Tras el autobombo de rigor, la alusión a la confianza empresarial y al crecimiento de la producción. entra en materia, y lo hace de la mano de la industria láctea, donde venden como un éxito propio una futura agrupación de cooperativas lecheras y un futuro proyecto industrial, Iparlat, que será un paso decisivo en la modernización del sector ganadero en Cantabria; claro que no sabemos a qué sector se refiere, porque el que fuera fuente de riqueza, estandarte de la región y actividad primordial o secundaria de una parte importantísima de la población de Cantabria, está gloriosamente fenecido y enterrado; de hecho ya es dudoso llamarlo sector. Abandono masivo de los productores de leche, que han hecho que la mayor parte de los terrenos agrícolas ya no tengan ningún uso y se conviertan en el objeto del interés especulativo de los constructores, incluídos los amigos del Presidente. El sector ganadero está quedando y va a quedar aún más en el futuro como una actividad simbólica en esta región y ninguno de estos farsantes, empezando con los del PSOE, que fueron los que comenzaron con la extensión del cuento de la cuota lechera, hasta los regionalistas pandereteros van a hacer nada porque sea otra cosa.

Otro caballo de batalla es la construcción e infraestructuras públicas, refiriéndose al suelo industrial, con la oferta de no sé cuántos metros cuadrados mayormente inocupado en la actualidad; viviendas de protección oficial, de las que prometieron más de ocho mil y apenas han pasado de las mil; puertos, de los que hay que suponer que el de Santander es un modelo, cosa que no merece ni comentario ya que todos sabemos como maneja el cortijo "Chiapucci " Del Olmo; o la autovía del agua, proyecto de todo menos claro y que parece que no se ajusta precisamente a la Ley.

Por fin el último baluarte es el turismo, ahí sí que echan el resto, y eso sin contar el que hacen continuamente miembros del Gobierno y de las empresas de él dependientes que tienen ya confeccionado un puente aéreo Santander-Pekín-Santander-Guatemala-Santander-Costa Rica-Santander-Pekín y vuelta a empezar. De todos modos si el principal activo de la región va a ser el turismo, conviene que así se indique, porque cuando vengan duras, que vendrán sobre todo cuando los países del este, Serbia, Croacia, Rumanía, etc. oferten sus nada despreciables paisajes a precios mucho más económicos que aquí, entonces sabremos dónde dirigir nuestras reclamaciones. Es penoso ver a los regionalistas cuyas únicas soluciones son las cafeterías, centros comerciales y hostelería pura y dura, porque en lo que se refiere a industria su proyecto estrella, como sabéis, no es otro que una fábrica de fibroyeso que no sé si alguna vez veremos funcionando y que no fabrica automóviles, componentes electrónicos, productos aeronáuticos o cosas similares sino placas de escayola, como veis tecnología punta.

En fin esto no da para más, os hablaría de los esquemas que adornan el panfleto sobre el círculo virtuoso de la economía o de la visión estratégica del Gobierno de Cantabria, pero son de tan bajo perfil que considero una falta de respeto comentarlos.